LaYaoijocker
Un fuerte golpe hizo que sasahara se
despertara de su pesado sueño, amargo como acostumbraba levantarse se acerco a
la ventana para notar que el día comenzaba a decaer, con el ceño fruncido
y los ojos a medio abrir, el lugar estaba oscuro, casi no se distinguía nada,
su cerebro aun no reaccionaba, era casi como si su mente no pudiera pensar en
nada. Sentado en el borde del colchón, viendo hacia el frente a la puerta
principal, inquieto entre momentos se remolineaba en su lugar,
distrayéndose cambiando de pose, en segundos se percato de la llegada de la
noche y con ella algo inesperado…….
Nekohive
Sus
pensamientos le atormentaban, la noche había llegado de la nada, e ahí él,
frente a la puerta y su constante pérdida de memoria le impedía obtener calma
en la oscura noche, al acercarse a tocar los interruptores de luz que se
encontraban cerca de la puerta esta se abrió ¡DE GOLPE, DE LA NADA! Pobre,
estaba más que asustado. De la puerta salió una sombra parecida a la de una
persona, si, eso era, una persona. Aquel tipo encendió la luz, dejándose ver.
Era Mickey, el mejor amigo de sasahara. Sasahara ni lo recordaba...
Reira
-¿Quién
eres?- Le preguntó Sasahara desconfiado y todavía algo alterado por el golpe de
la puerta.
Mickey
sólo sonrió, se acercó a él, dejó su abrigo en el respaldo de la silla y se
sentó al lado de la blanca cama de hospital sin decir nada. Fue totalmente
diferente a como lo había imaginado, creía que podría hablar tranquilamente con
él, pero le dolió demasiado el que su mejor amigo no lo recordara, ahora que lo
tenía al frente era completamente consciente de ello.
-Tranquilo,
soy uno de tus amigos.- Finalmente logró calmarse y contestarle.
Sasahara
se intentó incorporar en la cama para quedar a la misma altura que Mickey,
mientras tanto él preparaba un vaso de agua para su amigo.
-Toma.-
Le ofreció Mickey con una tierna sonrisa.
-G-gracias…-
Sasahara, todavía algo incómodo, aceptó dudoso el vaso de agua. Era algo que no
se podía ocultar, y Mickey se dio cuenta de ello.
-Creo
que será mejor que me vaya…- Se levantó de la silla y recogió su abrigo,
dispuesto a marcharse, no sin antes sonreírle a modo de despedida.
-No, espera…- Sasahara se dejó llevar por un impulso, cosa
que sorprendió bastante a Mickey, quien se giró al instante para escuchar lo
que su amigo iba a decirle, tratando de no dejar expuestas sus emociones...
Mely
Sasahara no pudo emitir otro sonido
luego de dejarse llevar y detener a Mickey, quién había quedado expectante al
llamado de su amigo. El joven había cedido a un impulso de su corazón, pero su
mente que ahora se parecía más a un lago en medio de una tormenta, donde cada
gota creaba una onda en su memoria, trayendo recuerdos y al mismo tiempo
distorsionando otros. Le decía que aquella persona no existía para el,¿su mente
o su corazón? ¿en cual confiar? , este debate duró apenas unos segundos. Mickey
comprendió la duda en Sasahara y se acercó sin que el se diera cuenta.
-no tienes que esforzarte - le dijo
poniendo su mano sobre el hombro del confundido Sasahara - siempre estaré para
ti. Luego de decir esto, Mickey se marchó, dejando un sentimiento muy incierto
en el aproblemado joven.
-Que es este dolor? -se preguntaba
mientras el silencio de la noche invadía su cuarto...
Patiky
Sasahara había sentido una punzada
en el corazón en el momento en que Mickey se marchó; era como si una estaca le
estuviese atravesando. La cuestión ahora era, ¿Mickey en verdad era su amigo
o... algo más? Y es que de alguna u otra manera, la mirada tan afligida que le
dedicó aquél chico, sumando el echo de como le hizo sentir, le daban a entender
otra cosa. Suspiró. Tenía tantas dudas, tanta curiosidad de saber la identidad
propia, saber si tenía padres, hermanos, o algún parentesco, quería recordar a
sus amigos... Sobretodo a ése chico que recién le había visitado, porque de
algo estaba seguro: Mickey no sólo era un amigo...
Nekohive
¿Un
mejor amigo, quizá? No,no, no, era algo más....,¿Hermano? No,¡Que estupidez!
Sólo le daba vueltas a la verdad irrefutable. Mickey era su amante.
-Mickey...es...mi
amante..- dijo a la solitaria habitación.
Al
confesar eso al aire la cabeza le dolió, como si un martillo diera golpe tras
golpe en su sien izquierda, ¡Mierda! Vaya que dolía. El pobre chico daba
gemidos de dolor y de vez en cuando un gruñido, pobre chico,
atormentadose en su incierto pasado del cual no sabía nada.... Los
recuerdos venían en colores vividos y daban vueltas como en un remolino. E ahí,
entre vividos colores vio a Mickey...
Mely
Entre
los pantallazos Mickey y él estaban en un parque, era de día... ¿O de noche tal
vez? Otro recuerdo incierto. Pero entre tanta duda, la única seguridad, era que
podía recordar el tacto firme y gentil de la mano de su acompañante.
Sasahara se dejó caer hacia atrás sobre la cama mullida, el dolor era
constante, ya se estaba acostumbrando a él. Pero de repente otro flash back en
su mente lo dejó perplejo
-
que... pero que... ¿quién es él? - se cuestionaba nervioso. En su mente, un
beso apasionado y abrasador fue suficientes para cuestionarse nuevamente la
existencia de Mickey. ¿Pero quién es este otro hombre en sus memorias? Los
recuerdos eran incluso más vividos que con Mickey, pero más dolorosos, de
repente su cuerpo comenzó a calentarse por otro tipo de recuerdos. Sonrojado
por su propia reacción agradecía el estar sólo ese momento, recordar el tacto
de esas manos por todo su cuerpo incluso en partes que él no recordaba.
Instintivamente dirigió sus manos hacia su entrepierna para calmar un poco su
ansiedad. Al terminar se quedó inmóvil por un rato y luego se Incorporó para
dirigirse al baño, lavó su rostro y se vio al espejo, se miró hipnótico
sintiendo más pena por ese reflejo sin identidad.
-
¿quién eres? - preguntó cómo esperando recibir respuestas. Pero no. Sólo
silencio
Nekohive
En
su fría habitación se encontraba el pobre joven. Sentía un vacío enorme en su
pecho, abrazo sus piernas tratando de proteger aquel "hueco" del frío
viento. "¿Es así como moriré?" Pensaba el chico. No lo culpen, tiene
miedo..., miedo de nunca poder saber quien se supone que era, miedo de quedarse
sólo, miedo de que los demonios de la noche fueran por el, miedo de estar
realmente perdido y loco.
-No
estoy loco...- decía al aire. La noche le abordó una vez más y un quejido se
hizo presente-¿Q..quien esta ahí?...- Dijo temeroso.
Pronto
se dio cuenta de más quejidos y ruidos extraños. Se envolvió en sábanas y
miraba con nervios el oscuro lugar, el interruptor de luz estaba al otro lado
de la habitación. Cuando iba poner un pie fuera en juraría haber visto una mano
debajo de la cama, dispuesto a arrastrarlo y hundirlo en aquello que ni deseaba
pensar. Se abrazo a si mismo en consuelo
-Hay
ruidos debajo la cama otra vez..., esta bien..., estaré bien...,¿Verdad?-.
En
eso una voz masculina le dijo.
-¿Lo
estarás?- la voz tenía maldad en su tono. Encendió la luz, era nada más y nada
menos que Mrs.Cherlione, el médico que abusaba sexualmente de Sasahara.
Mely
Sasahara
dio un brinco al escuchar aquella voz. Eso era estremecedor, era como una
corriente eléctrica en su espina.
-estas
condicionado a mi voz - dijo el doctor de apariencia amable riendo
siniestramente. Su tono de voz y su apariencia contrastaban de una forma
perturbadora.
-que
aún te paralices con mi voz es muy agradable. - decía intimidante al ir
acercándose hacia sasahara quién se encontraba en shock. El muchacho temblaba
cubierto por las sábanas como sí estas fueran a protegerlo.
Sin
percibirlo a pesar de verlo, el doctor llegó frente a Sasahara y sacó un reloj
del bolsillo de su bata, al instante de verlo Sasahara sonrió al doctor como un
cómplice seductor, estiro sus brazos abrazando al doctor.
-
Has tardado en volver. Ya empiezo a recordarte, querido doctor. - reclama
Sasahara pero al mismo tiempo no era el.
En
aquella confusa situación. ¿Que estará pasando?
Patiky
-Ha
pasado mucho tiempo, Sora...- le susurraba al oido al mismo tiempo que ambos se
dejaban caer sobre la cama.
-Mi
querido doctor... ah... Cherli.... -decia...
Quien
es Sora?... ese joven con una mirada seductora, con un intenso brillo en sus
ojo... que misterio hay detras de Sora... por que es tan diferente a Sasahara,
pero sobre todo que relación había entre Sora y Mrs.Cherlione
Reira
Sasahara
no entendía nada de lo que estaba pasando, pero su cuerpo no reaccionaba a lo
que él quería, y sentía que había algo en él que no iba bien…
-Me
alegra oír que me recuerdas.- Dijo Cherlione. –Con lo que le ocurrió a Sasahara
temía que tu también me olvidaras. –Le dio un corto pero intenso beso y se
quedó mirándolo fijamente.
-Jamás
podría olvidarte, ni siquiera con el hecho de estar atrapado en este cuerpo.-
Después de decir esto, Sora abrazó al doctor.
-Juro
que encontraré la forma de liberarte, así podré tenerte para mí todo el tiempo,
no sólo cuando logras tomar el control del cuerpo.- Aún sabiendo que su cuerpo
no estaba del todo recuperado para hacer nada, lo empujó a la cama y empezó a
desvestirlo.
Sasahara
era consciente de cada detalle, estaba expectante por todo lo que estaba
pasando y oyendo.
“¿Atrapado
en mi cuerpo…? ¿Cómo puede ser eso?” Pensaba el pobre Sasahara, confundido y
asustado, y sin poder evitar lo que esa noche estaba a punto de suceder…
A la mañana siguiente Sasahara
despertó de un salto. Confundido y medio dormido miró a su alrededor, ¿eso que
recordaba había sido real? Dudó durante unos segundos, pero el dolor que sentía
en varias partes de su cuerpo lo confirmaba. Se sentía afligido, asustado y
nervioso, quería saber más acerca de Sora… ¿era su otro yo?, ¿era alguien más
viviendo en su cuerpo?, no soportaba la incógnita… Pero no quería volver a
repetir lo que ocurrió esa noche, así que decidió averiguar lo que estaba
pasando…
Nekohive
Sasahara Se
levantó de un salto, pero cuando su peso tocó el suelo y la gravedad efectuó su
labor le hizo sentir dolor en las caderas. Apretó los labios para no dejar
salir ningún quejido, camino a un ritmo regular al espejo, se miro por varios
minutos y juraría que de un momento a otro vio a otra persona en el espejo,
salto del susto, sacudió la cabeza y aquel extraño rostro se había ido.
El sólo no podría descubrir nada y menos en
tal lugar, encerrado. Se paseo por todo el piso, desde la cocina hasta la
habitación, del baño a la cama, etc. Y de la nada escucho la puerta abrirse,
tembló de miedo y se escondió en sábanas, pero aquella voz sonaba dulce.
-¿Sasa...?- dijo Mickey. Ante esto lo miro
rápidamente y una sonrisa se formó en sus labios, esta vez no lo había
olvidado.
Amenos no desde su última visita. Se levantó y
espero a que Mickey se acercara, lo hizo acompañado de una enorme sonrisa.
Sasahara esperaba un abrazo pero recibió un beso, uno largo, sin embargo
Sasahara no pudo detenerlo, le agradaba, estuvieron a punto de recostarse en la
cama pero en eso Sasahara recordó los inicios de la noche anterior, no se había
duchado y no quería recibir a Mickey con el cuerpo "sucio".
-E..espera, no me he bañado y aún no te
recuerdo del todo...- las últimas palabras hirieron a Mickey, se noto en su expresión,
pero después sonrió tierno.
-Tienes razón, perdona.- se levantó de encima.
Sasahara dudaba si contarle o no lo del doctor
ese y lo de "Sora" , más aún no se confiaba. Comieron juntos y
conversaron un poco. Mickey tenía que irse y salió por la puerta, ante esto
Sasahara suspiro y se quedó pensando en como resolver aquel problema de
"Sora" y se le ocurrió algo vil para comprobar. Se haría pasar por el
tal "Sora" si el doctor se la creía podría sacarlo si insistía. En
eso la puerta se abrió
-¡Mick...!- se calló en cuanto vio Cherlion.
El plan empezaba justo ahí...
Mely
-veo
que ese tipo sigue rondando por aqui.... -susurro el doctor para si mismo.
Sasahara
lo escucho, pero pretendio no hacerlo. Estaba luchando contra esa paralisis que
esa voz provocaba en su cuerpo. Habia decidido hacerse pasar por Sora pero
decirlo era mas facil que hacerlo. De momento solo pretendio que no recordaba
lo de la noche anterior.
-
bien eh venido para tu examen de rutina Sasahara.- le dijo el Dr Cherlione con
un tono mas dulce.
-s...si
- respondio tembloroso para gusto del inspeccionante.
Cada
toque, cada roce se sus manos sobre su piel le provocaban escalofrios.
-tengo
que sobreponerme- pensaba para sus adentros. Recodo por un momento como fue el
estar bajo el control de Sora y tomando valor. Decidio intentar imitarlo.
Cherlione
habia estado haciendo el control médico de manera profesional. Cuando se quitó
el estetoscopio Sasahara se dio vuelta lentamente. El brillo en sus ojos y esa
mirada con pose gatuna lo decian todo. Sora estaba presente, o eso creyó
Cherlione.
-mmm....
Ha vuelto por mas?- preguntó Sasahara imitando el tono de voz de Sora. El
doctor sonrio nuevamente, tomo a "Sora" por la espalda y lo besó.
Sasahara lo soportó hasta que por reflejo lo alejo, esto despertó sospechas en
el doctor.
-por
que me alejas? - interrogó serio.
Sasahara
se dio cuenta de su error.
-cuanto
crees que debo soportar esto?- le respondio agresivo. Recordando algo de la
charla de anoche Sasahara disfrazó sus acciones
-entraste solo para tocar este
cuerpo y no me llamaste- continuo.... -Si acaso crees que puedes olvidarte de
mi estas equivocado. Acaso no recuerdas lo que debes hacer por mi? Porque no me
lo repites para saber si no me has olvidado?- dijo Sasahara con la expectativa
de que el doctor responda.....
Reira
Cherlione
lo observó algo sorprendido, pero rectificó su comportamiento rápidamente.
-¿Cómo te atreves a hablarme así, mocoso insolente?- Le reprochó con un tono
calmado pero seco, y una expresión dura e intimidante con la cual Sasahara se
quedó en blanco.
Tras varios segundos de silencio, Cherlione decidió continuar. Se acercó a
Sasahara y bruscamente lo empujó contra la cama quedando sobre él. Sasahara
seguía en silencio, si en ese instante intentaba pronunciar una sola palabra,
las lágrimas que con tanto esmero trataba de ocultar se terminarían escapando.
Lo peor de todo esto es que ni fingir ser Sora lo salvaría, a pesar de todo lo
que Cherlione le dijo a Sora la noche pasada no parecía que lo sintiera.
Minutos antes estaba confiado en que podría de alguna forma manipular aunque
fuera lo más mínimo a Cherlione, ahora no daba crédito a lo que estaba oyendo
mientras no era capaz de mover su cuerpo un solo centímetro, paralizado del
miedo. Esa mirada… era como ver directamente hacia la oscuridad.
-Voy a castigarte como te mereces, así aprenderás a no reprocharme nada.-
Empezó a arrancarle la ropa y a morderlo por todas partes.
Sasahara sólo cerró sus ojos, incapaces de contener sus lágrimas, mientras se
resignaba a ese amargo dolor.
-Así me gusta, ¿no ves que todo es más fácil así?- El cuerpo de Sasahara estaba
temblando, tanto el dolor como el miedo y la fatiga hacían que no se pudiera
calmar.
Cherlione se acercó a su frente y la besó, acariciando después su mejilla.
-Descansa.
Volveré para la próxima revisión.- Dicho eso, se dirigió hacia la puerta y se
marchó.
Segundos después entró alguien por la puerta, Sasahara estaba demasiado
exhausto tanto de cuerpo como de mente para darse cuenta de ello, el estrés que
se producía en su cuerpo no ayudaba.
-Sa…sahara?- Mickey miró atónito el cuerpo de su compañero, lleno de pequeñas
heridas, todavía tembloroso y con una expresión que daba a pensar que estaba al
borde de la locura.
Mickey no entendía lo que había pasado, pero antes de entrar en la habitación
pudo observar al doctor Cherlione salir de ella. En ese momento solo decidió
pensar en Sasahara, así que se acercó a él rápidamente y trató de llamar su
atención.
-Sasahara.- Lo zarandeó un poco y logró llamar su atención.
-Mickey…-
Al ver a Mickey sintió un gran alivio, pero sólo consiguió expresarlo por
lágrimas.
-Sasahara…- Mickey lo miró acongojado, queriendo saber que ocurrió pero
sabiendo que no debía preguntar.
Mickey lo abrazó mientras le acariciaba el pelo, Sasahara correspondió el
abrazo con fuerza, rompiéndole el corazón a Mickey en cada llanto.
Nekohive
Sasahara
además de triste se sentía enojado y estúpido. Su plan había fallado y ahora
Mickey se sentía mal por el.
-Sasahara...-
dijo Mickey, quien lo abrazo más fuerte y se sentía temblar.
Cualquiera
diría que de tristeza pero no, temblaba de enojó, no había que ser muy
inteligente para adivinar lo que le había pasado.
-N..no
puedo respirar...- dijo Sasahara, despertando a Mickey de sus pensamientos.
-Ah,
perdón...- dijo en defensa y suavizo el abrazo.
Sasahara
aún o dejaba de lanzar sollozos a la habitación y Mickey no dejaba de
sentir rabia por aún no conseguir las pruebas de que Sasahara no había sufrido
un "Accidente" , si no que alguien lo había hecho intencionalmente.
Sasahara pudo calmarse y disfrutar del calor de un abrazo, uno de alguien que
si quería.
Mely
La intranquilidad de Mickey no cesaba. A pesar de que su amado estaba correspondiendo sus sentimientos era evidente que seguía sin recordarlo. Decidió ir a buscar pruebas ahora que tenia un sospechoso. - Sasahara yo... -dijo el preocupado muchacho pero no continuo al notar que Sasahara se había dormido. Lentamente sacó su brazo fuertemente agarrado por su amado. Sin hacer ruido se fue de la habitación. El pasillo estaba concurrido- muchas visitas hoy- se dijo Mickey mientras se dirigía a la salida. Antes de salir dio un vistazo a la oficina del doctor Cherlione y con gesto decidido pensó - esta noche encontrare pruebas- y luego salio del hospital.
Horas mas tarde Mickey regreso sin ir a ver a Sasahara y se escondió en una habitación que estaba en desuso. Llegada la noche y fuera del horario de visita solo quedaban unos cuantos doctores y enfermeras. -ahora es cuando- se dijo a si mismo y cuando Cherlione salio a hacer su ronda Mickey irrumpió en su oficina. Comenzó a buscar entre sus cosas y en un cajón encontró unas fotos perturbadoras. -pero que demonios....
Patiky
Mickey se sintió desequilibrado, demasiado perturbado ante las fotografías que se encontraban en sus manos. ¿Cómo era éso posible? Su pequeño Sasahara se encontraba en todas y cada una de ésas fotos, desnudo, con marcas en todo su cuerpo, en algunas atado, en otras con posiciones un tanto comprometedoras... Era como si estuviese siendo abusado.
- No... Tú no... -Murmuró completamente alterado, no teniendo el suficiente valor como para observar más de aquellas imágenes. Impotencia era lo que sentía en esos momentos. Estaba inestable, completamente inestable, tanto que sus piernas y brazos, o más bien, su cuerpo entero estaba sufriendo varios temblores. ¿Cómo había pasado? ¿En qué momento? No entendía absolutamente nada. Era cierto que había dejado a Sasahara solo durante momentos pasados, cuando antes de ése accidente, aunque no lo suficiente como para que alguien pudiese cometer tales atrocidades.
- Perdóname... - Lanzó al aire, sintiéndose un total inepto. Había intentado proteger a Sasahara, y no lo había logrado. Sin embargo, había algo dentro de él que le decía que aquella persona en las fotografías no era su Sasahara.
No supo cuanto tiempo se mantuvo ahí, fuera de sí, hasta que oyó como algunas voces provenientes de fuera de la oficina perteneciente a aquél inhumano se iban acercando. Tenía unas tremendas ganas de golpearlo, de hacerle sufrir, pero no era el momento, ahora tenía que buscar la forma de salir. Y, para su buena suerte, aquellas voces no iban hacia la oficina, al contrario, pasaron derecho, por lo que suspiró con cierto alivio.
Guardó las fotografías en un sobre, y con todo cuidado e intentando pasar desapercibido, salió de ésa oficina, siendo ahora su destino la habitación de Sasahara. Quería asegurarse de que estuviese bien y no en manos de aquél ser disfrazado de Doctor..
Reira
Se dirigió sigilosamente hacia la habitación de Sasahara, pero se dio cuenta de que no estaba solo, así que antes de irrumpir con cuidado se asomó y se dispuso a escuchar.
-Sora… ¿tú no quieres desaparecer, verdad?- Cherlione estaba en la habitación, se acercaba a Sasahara con una jeringuilla, y al otro lado de la cama había una enfermera sujetándolo.
-Para, por favor…- Suplicaba Sasahara. –Yo no soy Sora…- Se puso a llorar, a penas podía hablar.
Cherlione se acercó a Sasahara y se sentó al borde de la cama.
-Sasahara, te lo explicaré porque ya casi he logrado mi objetivo, y tienes derecho a saber lo que te va a ocurrir.- Cherlione se aclaró la garganta y con su seria expresión habitual siguió hablando.
-Sin esta vacuna Sora desaparecerá. Es un experimento que creé hace varios años, donde permanece la conciencia de mi amado que murió en un accidente de coche. El problema de este experimento es que la vacuna necesitaba rápidamente ser inyectada en un receptor, sino le habría perdido por segunda vez… En aquél momento tú eras el mejor receptor que tenía en el hospital, así que metí su conciencia dentro de tu cuerpo, y desde entonces intencionadamente me convertí en tu médico. Cada cierto tiempo necesitaba inyectarte otra dosis de la vacuna sino Sora desaparecería, porque la vacuna todavía no estaba terminada. Cada vez que su conciencia despertaba, la tuya dormía, por eso jamás te diste cuenta, pero después del accidente todo cambió. Cuando Sora se despertaba tú también estabas despierto, podías verlo y sentirlo todo aunque él tomara el control del cuerpo. Esto me hizo tener que darme prisa en terminarlo, y es por eso que ha habido algunos efectos secundarios, como tu pérdida de memoria, que no tenía que haber durado tanto tiempo. Por suerte, con dos vacunas más no tendrás que preocuparte de nada más, Sora despertará y tu dormirás tranquilamente para siempre.- Dicho esto Cherlione, con una sonrisa bastante aterradora, agarró a Sasahara para que no se moviera con intención de inyectarle la vacuna.
Sasahara no podía creer lo que estaba oyendo, tantos años con el mismo doctor, y ahora todo esto… era demasiado para su mente. Pero Mickey, escuchando todo detrás de la puerta tampoco podía creer lo que estaba ocurriendo… Conocía a Sasahara desde hacía años, y jamás sospechó nada semejante. Sin pensarlo, y con toda la rabia encima, entró de golpe y corrió hacia Cherlione antes de que éste le inyectara la vacuna, y lo agarró tirándolo al suelo y tratando de pegarle, pero Cherlione aunque en aspecto exterior no lo pareciera, no era nada débil, y se defendió.
-Sora… ¿tú no quieres desaparecer, verdad?- Cherlione estaba en la habitación, se acercaba a Sasahara con una jeringuilla, y al otro lado de la cama había una enfermera sujetándolo.
-Para, por favor…- Suplicaba Sasahara. –Yo no soy Sora…- Se puso a llorar, a penas podía hablar.
Cherlione se acercó a Sasahara y se sentó al borde de la cama.
-Sasahara, te lo explicaré porque ya casi he logrado mi objetivo, y tienes derecho a saber lo que te va a ocurrir.- Cherlione se aclaró la garganta y con su seria expresión habitual siguió hablando.
-Sin esta vacuna Sora desaparecerá. Es un experimento que creé hace varios años, donde permanece la conciencia de mi amado que murió en un accidente de coche. El problema de este experimento es que la vacuna necesitaba rápidamente ser inyectada en un receptor, sino le habría perdido por segunda vez… En aquél momento tú eras el mejor receptor que tenía en el hospital, así que metí su conciencia dentro de tu cuerpo, y desde entonces intencionadamente me convertí en tu médico. Cada cierto tiempo necesitaba inyectarte otra dosis de la vacuna sino Sora desaparecería, porque la vacuna todavía no estaba terminada. Cada vez que su conciencia despertaba, la tuya dormía, por eso jamás te diste cuenta, pero después del accidente todo cambió. Cuando Sora se despertaba tú también estabas despierto, podías verlo y sentirlo todo aunque él tomara el control del cuerpo. Esto me hizo tener que darme prisa en terminarlo, y es por eso que ha habido algunos efectos secundarios, como tu pérdida de memoria, que no tenía que haber durado tanto tiempo. Por suerte, con dos vacunas más no tendrás que preocuparte de nada más, Sora despertará y tu dormirás tranquilamente para siempre.- Dicho esto Cherlione, con una sonrisa bastante aterradora, agarró a Sasahara para que no se moviera con intención de inyectarle la vacuna.
Sasahara no podía creer lo que estaba oyendo, tantos años con el mismo doctor, y ahora todo esto… era demasiado para su mente. Pero Mickey, escuchando todo detrás de la puerta tampoco podía creer lo que estaba ocurriendo… Conocía a Sasahara desde hacía años, y jamás sospechó nada semejante. Sin pensarlo, y con toda la rabia encima, entró de golpe y corrió hacia Cherlione antes de que éste le inyectara la vacuna, y lo agarró tirándolo al suelo y tratando de pegarle, pero Cherlione aunque en aspecto exterior no lo pareciera, no era nada débil, y se defendió.
Nekohive
Un golpe directo a la nariz de Mickey, incluso se pudo escuchar algo tornar. Sasahara, horrorizado miraba la escena, por otro lado, la enfermera corrió a los largos pasillos a pedir ayuda.
-Todo este tiempo,...¡Todo este maldito tiempo has sido tu el destructor de Sasahara!- grito mickey ante limpiarse la sangre de la nariz.
-Y tu el idiota que me lo confío.- dijo casi riéndose y queriendo lanzar otro golpe.
Pero falló, mickey no era tan malo en peleas, esquivo el golpe y pateo el vientre del doctor, lanzó un golpe a sus costillas derechas y arrojó al suelo. Sahara seguía en shock, estaba inmóvil.
-¡Sasahara!- grito mickey, logrando llamar la atención de sasahara. - Corramos...-dijo entre jadeos exhaustos, tomó la mano de su amado y se dispusieron a correr.
La enfermera ya regresaba con guardias de seguridad, se toparon miradas y empezó la persecución. Cherlion, con la esquina de labio roto, se dispuso a correr por igual. Mickey y Sasahara lograron despitarlos y esconderse en los baños.
-Sasa...,mi amor...- dijo mientras dejó escapar unas lágrimas. Lo abrazo. Sahara lloraba por igual- perdón..., perdóname...-
-¿M..mickey?- dijo entre ahogadas lágrimas.- tengo miedo...-
-Yo también, pero...- lo tomó por las mejillas y lo beso.- saldremos y seremos felices, ya verás...- se limpio las lágrimas y continuaron su escape.
-En rehabilitación...- mencionó Sasahara.- Hay una puerta que da a la salida.., L..lo sé porque ahí me hizo..- comenzó a llorar desconsoladamente.
-Sasa, no lo recuerdes, no eso que te hicieron.- se detuvo a abrazarlo fuerte y unas voces y fuertes pisadas se acercaron
Un golpe directo a la nariz de Mickey, incluso se pudo escuchar algo tornar. Sasahara, horrorizado miraba la escena, por otro lado, la enfermera corrió a los largos pasillos a pedir ayuda.
-Todo este tiempo,...¡Todo este maldito tiempo has sido tu el destructor de Sasahara!- grito mickey ante limpiarse la sangre de la nariz.
-Y tu el idiota que me lo confío.- dijo casi riéndose y queriendo lanzar otro golpe.
Pero falló, mickey no era tan malo en peleas, esquivo el golpe y pateo el vientre del doctor, lanzó un golpe a sus costillas derechas y arrojó al suelo. Sahara seguía en shock, estaba inmóvil.
-¡Sasahara!- grito mickey, logrando llamar la atención de sasahara. - Corramos...-dijo entre jadeos exhaustos, tomó la mano de su amado y se dispusieron a correr.
La enfermera ya regresaba con guardias de seguridad, se toparon miradas y empezó la persecución. Cherlion, con la esquina de labio roto, se dispuso a correr por igual. Mickey y Sasahara lograron despitarlos y esconderse en los baños.
-Sasa...,mi amor...- dijo mientras dejó escapar unas lágrimas. Lo abrazo. Sahara lloraba por igual- perdón..., perdóname...-
-¿M..mickey?- dijo entre ahogadas lágrimas.- tengo miedo...-
-Yo también, pero...- lo tomó por las mejillas y lo beso.- saldremos y seremos felices, ya verás...- se limpio las lágrimas y continuaron su escape.
-En rehabilitación...- mencionó Sasahara.- Hay una puerta que da a la salida.., L..lo sé porque ahí me hizo..- comenzó a llorar desconsoladamente.
-Sasa, no lo recuerdes, no eso que te hicieron.- se detuvo a abrazarlo fuerte y unas voces y fuertes pisadas se acercaron
Mely
- debemos apurarnos- dijo Mickey. Lo mas rapido que pudieron correr, se dirigieron hacia el estacionamiento, Mickey habia preparado su auto en la calle fuera del hospital para no ser visto, no pensó que le serviria tan bien para el escape sorpresa. -Mickey, a donde iremos- preguntó Sasahara mientras su acompañante lo metia al auto y se disponia a arrancar.
-ellos saben donde vives Sasa y seguramente saben donde vivo. Por el momento saldremos de la ciudad para pensar. -dijo Mickey mostrandose muy preocupado pero siendo capaz de calmarse y pensar.
- no puedo creer que tenga a alguien mas dentro mi- se dijo el atormentado joven tomandose la cabeza con ambas manos.
- no te preocupes- le dijo Mickey para sorpresa de Sasahara.
- luego de escuchar a ese psicopata me di cuenta de que estaba muy preocupado por esas vacunas. Por lo que escuche si no te inyecta eso ese tal Sora desaparecerá.- analizaba Mickey tratando de calmar a su amado. Quien sonrió ante las buenas intenciones de él. Pero no pudo evitar sentir pena por el destino de .....-Sora...-
En el hospital~
-doctor... Recibimos el informe del escuadron de busqueda. No los hallaron en sus casas.- informó una enfermera mientras Cherlione caminaba de un lado a otro de la oficina. -pues sigan buscando maldita sea!! - grito enfurecido haciendo que la enfermera saliera corriendo. -Sora.... No te perderé de nuevo. -murmuró el doctor desesperado en su locura dando un golpe al escritorio que terminó abollado. -no te dejaré llevarte a mi Sora... Sasahara.... Tu cuerpo es mio....
- debemos apurarnos- dijo Mickey. Lo mas rapido que pudieron correr, se dirigieron hacia el estacionamiento, Mickey habia preparado su auto en la calle fuera del hospital para no ser visto, no pensó que le serviria tan bien para el escape sorpresa. -Mickey, a donde iremos- preguntó Sasahara mientras su acompañante lo metia al auto y se disponia a arrancar.
-ellos saben donde vives Sasa y seguramente saben donde vivo. Por el momento saldremos de la ciudad para pensar. -dijo Mickey mostrandose muy preocupado pero siendo capaz de calmarse y pensar.
- no puedo creer que tenga a alguien mas dentro mi- se dijo el atormentado joven tomandose la cabeza con ambas manos.
- no te preocupes- le dijo Mickey para sorpresa de Sasahara.
- luego de escuchar a ese psicopata me di cuenta de que estaba muy preocupado por esas vacunas. Por lo que escuche si no te inyecta eso ese tal Sora desaparecerá.- analizaba Mickey tratando de calmar a su amado. Quien sonrió ante las buenas intenciones de él. Pero no pudo evitar sentir pena por el destino de .....-Sora...-
En el hospital~
-doctor... Recibimos el informe del escuadron de busqueda. No los hallaron en sus casas.- informó una enfermera mientras Cherlione caminaba de un lado a otro de la oficina. -pues sigan buscando maldita sea!! - grito enfurecido haciendo que la enfermera saliera corriendo. -Sora.... No te perderé de nuevo. -murmuró el doctor desesperado en su locura dando un golpe al escritorio que terminó abollado. -no te dejaré llevarte a mi Sora... Sasahara.... Tu cuerpo es mio....
Patiky
Mientras tanto en el auto, el chico mayor iba conduciendo sin descanso alguno y, a su lado, Sasahara dormía tan plácidamente, siendo razonable, considerando todas las lágrimas derramadas y la sorpresa que se había llevado ése día. Ambos estaban exhaustos, probablemente Sasahara más que Mickey, aunque éste último, se encontraba más bien adolorido. Por más que le costará admitirlo, aquél médico, a pesar de tener cara de idiota y verse frágil, sí que tenía una fuerza increíble.
Tenía que alejarse cuánto antes de la ciudad, lo más que se pudiese, pero no tenía idea de a donde dirigirse. No tenía familiares o conocidos fuera de su localidad y, a pesar de llevar tarjetas y algo de efectivo, no sería suficiente para subsistir, al menos no por más de dos semanas. Y es que, aún teniendo un buen trabajo, la mayoría del sueldo se iba en las medicaciones y atenciones para Sasahara.
- Maldición... - Murmuró Mickey, apretando el volante, tan fuerte que sus nudillos se pusieron en blanco. De haber sabido, de haberse enterado mucho antes, habría sacado a su amado de ése infierno, y le habría llevado a un lugar más seguro. Se arrepentía completamente por haber pagado para que ése médico, supuestamente el mejor en su campo, atendiese a Sasahara. Y lo peor es que se arrepentía de haberse dejado influenciar para que se le internara en ése hospital.
Entonces, miró por unos momentos a la persona que se encontraba de copiloto. Su mirada se ablandó en cuantro se encontró con la expresión tan relajada que éste poseía. Se veía tan lindo, tan tranquilo, lejos de todo problema... Desde tiempo atrás había dicho que le protegería de todo y todos, y definitivamente lo iba a cumplir. Le haría feliz, lo alejaría de todo mal sin importar las consecuencias.
- M-mickey... -Escuchó como su nombre se escapaba de entre los labios del menor e, inconscientemente una pequeña y tierna sonrisa se le formó en los labios.
- Estoy aquí, Sasa... Y voy a protegerte a cómo de lugar. -Formuló decisivo, a pesar que el niño no podría escucharle. Piso el acelerador una vez que el semáforo se puso en verde, estando cerca de salir de la ciudad, estando cerca de conseguir la libertad de Sasahara. Pero, aún no era hora de cantar victoria; era cierto que estaban a punto de alejarse, pero no se pondría feliz hasta estar a un par de kilómetros fuera de la ciudad.
Sin embargo, por algún motivo, por alguna razón, sentía como su pecho se oprimía, como si tuviese una corazonada. Sólo esperaba que fuese imaginación suya, y no algo relevante.
cadavre exquis "consecuencias"
Cadáver exquisito es un juego de palabras infantiles por medio del cual se crean maneras de procrear, es decir, sacar de una imagen muchas más. El resultado es conocido como un cadáver exquisito o cadavre exquis en francés. Es una técnica usada por los surrealistas en 1925, y se basa en un viejo juego de mesa llamado "consecuencias" en el cual los jugadores escribían por turno en una hoja de papel, la doblaban para cubrir parte de la escritura, y después la pasaban al siguiente jugador para otra colaboración.
Bueno Minna-san como verán estoy proponiendo que juguemos que les parece? si, sé sigo de desaparecida, pero miren les propongo esto para cerrar este año que por dios paso rapidísimo, ya otro año que se nos va, que bonito y triste a la vez, en fin continuando, ya posteare después sobre lo ocurrido este 2014 algo así como recuento.
Como leyeron arriba, es un cadáver exquisito, yo comencé la historia y ustedes continuaran la historia a partir de ahí.
A diferencia de un cadáver exquisito, en vez de solo dejarles una parte del final, les dejo todo el escrito ya que al no saber bien que ocurre o hace el personaje podrían repetir la acción y en verdad se haría un caos
El que quiera puede participar les dejo las reglas de este juego y como lo llevaremos a cabo
- *el juego es de temática libre
- *no tiene que ser muy largo pero si mayor a 6 párrafos y menor a 20
- *No hay censura, puede ser soft, hard, SM o lo que quieran
- *la continuación se le envía por medio de inbox a la coordinadora del juego y ella publicara
- *manden su nombre para que la coordinadora les agregue a la lista
- *la coordinadora avisara si ya alguien está en proceso de la siguiente pieza.
- *Le enviaran a la coordinadora el escrito y sus datos para ser publicado – nombre o seudónimo, no es necesario pero si quieren facebook o pagina web
- *El personaje principal se llama sasahara y es hombre obvio
- *no usen palabra como nani? Etto.. eviten el uso de palabras en japonés, está permitido usar el chan, san, sama ,Dono, sensei, sempai, y demás títulos honorarios.
- *cualquier estilo de narración está permitido.
- *se puede participar varias veces, una ves terminado la lista de participantes se repite para los que quieran.
- *El escrito no se tiene que enviar de inmediato, pueden tomarse su tiempo con un limite máximo de 3 días.
- *Las piezas, como llamaremos a los escritos, serán publicados en esta sección, pero todo se atenderá vía facebook.
- *Las piezas no se mostraran hasta ya ir avanzados pero estas se mandaran a los participantes, pero solo la pieza desde donde ellos tendrán que continuar.
El contacto es por medio de
NOTA- el escrito se le tiene que enviar a la coordinadora que lo ira juntando para cuando finalice el juego.
La coordinadora es LaYaoijocker de Yaoijocker Adixió Al ♥ YAOI
avisos y demás se llevaran acabo por facebook en el grupo llamado
Grupo cerrado, sólo participantes que pidieron unirse
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